Renfe estrena un centro de gestión del AVE en Barcelona para agilizar la reacción ante las incidencias
Infraestructuras
El nuevo espacio situado en la estación de Sants centraliza la operativa y la atención al viajero de los trenes de larga distancia que salen, llegan o pasan por la capital catalana

Los trabajadores se encuentran ahora en un puesto de trabajo mucho más preparado que el anterior
En la pantalla del nuevo centro de gestión de Renfe en la estación de Sants aparecen las incidencias que hay alrededor de Valencia y las que se dan en la aproximación a la estación de la ciudad francesa de Lyon. Todos los trenes de la operadora pública que salen, llegan o pasan por las vías de alta velocidad de Barcelona son monitorizados desde este nuevo lugar, muy modesto si se compara con su homólogo en Atocha pero un gran avance si se tiene en cuenta el pequeño y anticuado espacio en el que antes trabajaba el personal encargado de dar respuesta a cualquier incidencia.
El personal de la sala gestiona el AVE y el Avlo, pero también los Euromed, Alvia, Intercity y Avant que circulan con origen o destino Barcelona, tanto los del corredor mediterráneo como los que se dirigen al norte, así como los más numerosos: los que van y vienen a Madrid. También se incluyen los cuatro trenes diarios que cruzan la frontera en la ruta que conecta España con Marsella y Lyon, y que a partir de abril del año que viene sumarán otro más a Toulouse.
El “corazón del servicio” se encarga de todos los preparativos que el usuario no ve y busca solución a los problemas
Este centro dedicado exclusivamente a la alta velocidad es “el corazón del servicio”, según el presidente de Renfe, Raül Blanco. Replica en cierto modo los centros de gestión de operaciones e información que Renfe tiene en Barcelona para Rodalies, uno en estación de França y otro en El Clot. Desde aquellos se gestiona toda la circulación de los trenes de Rodalies y regionales. La misma filosofía se sigue en el nuevo espacio habilitado en las instalaciones de la estación de Sants, que ha supuesto una inversión de algo más de un millón de euros por parte de Renfe.
La pantalla muestra la malla con los trenes que circulan por e corredor mediterráneo en ese momento
La reforma ha ido a cargo de la empresa Ingevideo, que ha equipado el lugar con un videowall de casi diez metros formado por 14 pantallas en el que se pueden ver los trenes estacionados en los andenes de Sants en un lado y su avance por la malla ferroviaria en el otro. La tecnología instalada también permitirá que algún día se puedan lanzar mensajes a través de la megafonía de los trenes desde el propio centro de control, pero fuentes de Renfe reconocen que aún no está operativo su uso.
El objetivo de la compañía es aumentar el número de personal dedicado a trabajos de gestión en este centro, a todas luces escaso en la actualidad, con una sola persona para gestionar las circulaciones con Francia y hacer de interlocutora con los gestores de infraestructuras franceses, dos dando respuesta a todas las necesidades operativas y de producción de la alta velocidad y otros dos encargados de la gestión comercial y de hablar con interventores y personal a bordo.
En la sala hay cinco trabajadores y un jefe del servicio gestionando el día a día
Más allá de lo que pueden ver los viajeros, estos trabajadores se encargan de gestionar los equipos que garantizan que el tren pasará por los talleres de Can Tunis a ser limpiado a una determinada hora, que el maquinista tendrá un taxi para volver a la estación tras dejarlo allí, que el servicio de catering recargará de suministros el bar en cuanto el convoy aparezca por el andén...
A su vez, también busca una mejor coordinación entre los equipos operativos, que antes se agolpaban en un cuarto como podían en caso de emergencia, y ahora disponen de una sala para reunir el equipo de crisis junto al personal encargado de gestionar aspectos como los servicios alternativos de bus en caso de corte, comida y bebida en grandes retrasos o incluso las reservas de hotel si se da el caso.